Movilidad sustentable: estrategias para la implementación del transporte público eléctrico en Santiago de Cuba

El mundo está en constante movimiento y la necesidad de desplazamiento dentro de las ciudades es cada vez más evidente. Con este incremento, crecen las aspiraciones de utilizar medios de transporte sostenibles, como los eléctricos, que han ganado protagonismo internacionalmente por sus ventajas. Cuba no es ajena a esta dinámica. A pesar del embargo económico de Estados Unidos, en 2016 el Gobierno autorizó la importación de medios de transporte alternativos, especialmente eléctricos. Se estima que ya existen unas 300.000 bicicletas y motocicletas eléctricas en el país (IPS Cuba, 2022). Esta iniciativa busca mejorar la movilidad y contribuir a la sostenibilidad, reduciendo las emisiones de contaminantes. En la provincia de Santiago de Cuba, los residentes también se benefician de esta tendencia al usar medios de transporte eléctricos como triciclos, motocicletas y bicicletas, los cuales mejoran la calidad del transporte. Sin embargo, hay una baja oferta de transporte público y alta congestión en las paradas. Esta deficiencia afecta negativamente la calidad de vida de los habitantes, limitando sus opciones de desplazamiento. La ineficiencia del transporte público y la falta de infraestructura adecuada para medios alternativos. En respuesta a este desafío, se busca elaborar estrategias para la implementación del transporte público eléctrico en Santiago de Cuba, con el objetivo de propiciar una movilidad sustentable. Este es el objetivo principal de este Trabajo de Obtención de Grado. Además, se espera que los resultados sirvan como referencia para otras ciudades cubanas con características semejantes. La intención es incorporar esta propuesta como política pública en el Plan Maestro de Transporte de Santiago de Cuba, sentando las bases para el futuro. La pregunta principal de este proyecto de investigación es: ¿Qué estrategias podrían propiciar la implementación del transporte público eléctrico en Santiago de Cuba? La metodología es empírica, con enfoques cuantitativos y cualitativos, utilizando las técnicas de investigación: observación participante, entrevistas y encuestas. También se emplea el método de la Matriz DAFO para diagnosticar y evaluar las potencialidades y restricciones existentes, diseñando así las estrategias y acciones estratégicas necesarias.